Camino vano de la ilusión
donde el querer germina.
Tan cerca que puedo tocarlo.
Tan lejos, que desanima.
Ya no tengo el valor para seguir,
allí donde mi corazón suspira.
Aunque sueño en mi interior
llegar, - donde más palpita-
Pero la fuerza del desamor
me hace caer de rodillas.
Y así suplicar
¡Vida!, ¿por qué no eres mía?
Llama incierta que caes
a un lado del camino.
Impidiéndome ver
cuál será mi destino.
Dime, si aún tienes poder
¿Por qué no puedo olvidarla?
Y en las sombras el recuerdo
de una fingida fantasía.
-Si quiero- y una sonrisa.
Aliento de la imaginación
¡Que era a mí a quien sonreía!
Pero el abrazo del amor
otro lo poseía.
Yo solo tengo la pena,
que aunque su alma esté cerca
nunca podré abrazarla.
Así pues, mi corazón atormenta.
Si ella me quiere, dolor
de no poder tenerla.
Si no me ama, la pena
que daña mi alma.
Y la falta de valor, para seguir
por el sendero de mi vida.
¡Qué ya no es nada!