A ti que allá a lo lejos te distancias sumiendo nuestro amor en el olvido, amor de aquellos tiempos que pasaron, dedico este romance que ahora escribo.
Jamás hubo un engaño por mi parte. ¡Lo juro por mi honor y así lo afirmo! Dios sabe que mentí, pero a ti nunca; te digo la verdad, hoy ya tranquilo.
Es cierto que escribiera unos poemas tratándote fatal, mas fueron hijos del ansia de tenerte entre mis brazos; mi Musa en esos días fue el Maligno.
Hoy quiero que lo pienses y decidas, señora debes ser de mi Destino; tú tienes en tus manos mi futuro, sopesa tu interés en compartirlo.
Que pobre sigo siendo, pero honrado; dejé jamás de serlo en mi cariño. pregúntale a tu Virgen Macarena, seguro te dirá lo que yo mismo.
No importa lo pasado. Te recuerdo igual que en la estación, cuando nos vimos; y quiero recobrar, uno por uno, los besos que me diste y que aún ansío.
_________________ La gloria es de quien la busca; la suerte del que la encuentra.
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