Ya hace unos cuantos días, en el Ferrol, un guardia civil del Servicio Marítimo. Salieron en busca de un desaparecido. Lo hicieron de noche, en una Zodiac en medio de una tempestad con vientos de fuerza ocho.
A estos dos valientes les importaron tres leches las condiciones meteorológicas. Había una persona desaparecida y ellos, conscientes de que se jugaban la vida, fueron a ver si lo encontraban. La Zodiac era una pequeña cáscara de nuez en una batidora. Ellos eran expertos en estas lides, hasta que sucedió la tragedia. La embarcación sufrió un golpe de mar y uno de los guardias cayó por la borda. Su compañero no lo dudó ni un segundo y se lanzó a por él. No hubo nada que hacer, no pudo hacerse con su pareja que finalmente, al día siguiente apareció ahogada.
No ha habido honores militares en su entierro. Tan sólo los que les hicieron sus propios compañeros. Le impusieron La Cruz Roja al Mérito Policial, le dieron la bandera que cubrió su féretro a su mujer y a sus dos hijos, y sansacabó la historia. Una historia macabra de la que ningún político se hizo eco. Estos prometen, nos quieren embaucar con mentiras para sacarnos el voto. Pero ni una sola mención hacia estos hombres, que cada vez que salen en sus embarcaciones, son conscientes de que se juegan la vida por cuatro cuartos.
No he dicho el nombre de ese héroe anónimo ni de su acompañante porque a ellos no les hubiera gustado. Siempre hacen lo mismo: En la mar, en las montañas en los pantanos y allí donde se les reclaman acuden y nos muestran con su ejemplo lo que es dar su vida por los demás. No por dinero, si no por una vocación que para ellos la quisieran aquellos que viven de la mentira, de sangrar al pueblo, de promesas que saben no van a cumplir, que utilizan a las víctimas del terrorismo como moneda de cambio para deshacer una patria cada vez más desmembrada.
En la Popa de sus barcos ondea la bandera de España. Esa que cubrió tantos catafalcos de tantos muertos por su patria. Por cierto: ¿Qué bandera llevan las embarcaciones de las CC.AA que berrean por su independencia?. ¿La Señera, la ikurriña, la gallega?.
Yo tengo sobre el monitor de mi ordeanador una pequeña bandera de mi España con un lazo negro en el centro por todos esos caídos a los que a nadie les importa, salvo a sus admiradores, amigos, compañeros y familiares. Estos últimos tienen que añadir al dolor de la pérdida de su ser querido, la de la indiferencia, el mercachufleo con los que los han matado,el no pagarles a su debido tiempo,(conozco a algunos,muchos: Que les deben unas dietas miserables Porque dicen que no hay dinero.
A ese guardia muerto, yo le dedico estas pobres palabras, que esté donde esté, quizás le puedan llegar. A todos los guardias civiles de bien, que son la inmensa mayoría, mi apoyo y el de tantos españoles, sean del bando que sean. En cuanto huelen a chamusquina llaman al Benemérito Cuerpo, con la seguridad de que vendrán enseguida a sacarles las castañas del fuego.
Hay una estrofa en su himno que dice: "Instituto gloria a tí, por tu honor quiero vivir". Honor, esa palabra de la que ya no saben ni lo que significa casi toda la clase política y por la que viven y mueren estos hombres y mujeres. y yo a modo de epitafio os recuerdo el final del himno:"¡¡¡VIVA HONRADA LA GUARDIA CIVIL!!!.
