Porque me siento aludido en cuanto a lo de acólito y demás lindezas de este tipo. Yo no le haría ni pajolero caso. Que yo sepa nunca se ha escrito aquí, nada indemostrable. Hemos dicho (yo quizás más), perrerías de todo quisque cuando se las han merecido.
Yo, en mi familia he tenido muertos en aquella guerra maldita por ambos bandos, pero mira por donde hay politicastros que juguetean al pito pito gorgorito con aquellos muertos. La mitad de los cuales murieron sin saber qué coño pintaban allí pegandole tiros al vecino del quinto. Mientras ese vecino le preguntaba a un hermano de la trinchera de enfrente, cómo estabn sus padres.
Zapatero ha destapado esos recuerdos, con lo de su abuelo. Que según parece no era trigo demasiado limpio y traicionó a sus compañeros por lo que le dieron matarile.
En fín, Antonio. A palabras necias oídos sordos. Ni caso.
