FRÍO

 

 

 

 

 

Siento frío. Devora la tristeza
mis entrañas. Y brama mi garganta
al contemplar el mundo donde tanta
desgracia, mortandad, odio y vileza

engendraron. Ahogaron con rudeza
intolerante a la verdad. Y espanta
lo falso de una fe que ya no aguanta
la más mínima luz a la certeza.

Este helor que me causa lo que, santo,
usó para imponerse a horrenda pira,
me llena el corazón de desencanto.

Descubro de la mitra su mentira,
y anégase mi cara con el llanto
que mana de mi pecho en justa ira.



© Antonio Pardal Rivas

28-01-07



 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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