AMANDO (SONETO CON COLA)

 

 

 

 

 

Amando la dulzura de tus ojos
voy pasando mi vida poco a poco,
divina amada mía.
Y juro que de amor me vuelvo loco
cuando beso tus bellos labios rojos,
al fin de cada día.

Nunca tomes en cuenta mis enojos
si al tratarte, mi bien, yo me equivoco.
Lo hago sin falsía.
Pues con ello yo mismo me trastoco,
al ver que no complazco tus antojos,
con gran descortesía.

Trátame con el tierno amor de un hada,
con la dulce bondad que tú alma guarda,
y cándida alegría,
para darle consuelo a mi dolor.

Pues si no me acaricia tu mirada,
lograrás que mi alma, triste, arda,
con trágica agonía,
en la llama encendida por tu amor.

© Antonio Pardal Rivas

Octubre-2006

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

VOLVER