
Sueña con el que siempre has deseado,
abrazada al calor de tu almohada.
Sueña, sueña, doncella enamorada,
con ese que jamás vendrá a tu lado.
Sueña con el que nunca te ha abrazado
y por quien tú jamás serás besada,
aguardando impaciente la llegada
de ese príncipe azul enamorado.
Y mientras en tus sueños fantaseas
con amores que nunca serán tuyos,
yo esperándote a ti sigo paciente,
soñando en que despierta por fin seas
piadosa con mis cálidos arrullos
y alivies el dolor que mi alma siente.
©
Antonio Pardal Rivas
5-marzo-2007
|