SURATI
En la noche te hallé e iré a buscarte.
Donde sea es igual; pero si el Hado
dos senderos cruzó será obligado
caminar al azar, a cualquier parte.
En verdad que, mi amor, quisiera darte
un tesoro grandioso y a tu lado
olvidar los fantasmas del pasado
y vivir por tu amor y para el Arte.
Mas me temo que todo quede en sueños
de poetas que cantan a la Luna;
que esos ojos traviesos y risueños,
semejantes a estrellas, no hay ninguna
esperanza que puedan ser mis dueños:
Es mi sino fatal, mi cruel fortuna.
Francisco Escobar Bravo
15 de mayo de 2007