EL ALMA SE ME LLENA DE ALEGRÍA

 

El alma se me llena de alegría.
Vibré con ilusión como un chiquillo.
Brotó de mi garganta un estribillo
de mágicos acordes, vida mía.

Prosigue, por favor, que esa armonía
deseo que perdure y que ese brillo,
que un tono a mi mirar presta de pillo,
no quiero que se apague todavía.

Ansioso por gozar de tus placeres
igual estoy que siendo casi un mozo.
¡Benditos el amor y las mujeres

que llenan esta vida de alborozo!
¡Divinos en verdad son esos seres
que colman al varón de tanto gozo!


Francisco Escobar Bravo
10 de enero de 2008

VOLVER