No alcanzo a comprender tanta belleza
con que nos premia este lindo planeta,
la muestra más excelsa y completa
que nos da la madre naturaleza.
Ni entiendo que haya tanta vileza,
que esta especie sin caridad excreta,
para quebrar la concordia perfecta
de extraordinaria y altísima pureza.
Desmanes de locura la destrozan,
rompen su frágil, justa proporción
y ella protesta con los que así gozan.
Pobre herencia, con tan vil agresión,
para los que aún inocentes retozan
les dejaremos por tan ruin traición.
14 de agosto de 2006.