Anochece, y la luna, con suave reflejo
alumbra el camino, atrás quedan las luces
de la ciudad, recuerdos del barrio viejo
toda una vida, futuro, ¿dónde les conduces?
Gran pesar asola su ánimo, es su corazón
aquel que queda, cuerpo sin mente ni alma
el que marcha, deben hacerlo y no hay razón
para unirlos, más deben conservar la calma.
Lugar es que aman, que les concedió y vio nacer
presto han de abandonar, ni siquiera les vera morir
no pueden aunque quisieran, disfrutar ese placer
no pueden vivir aquí... sin ti no pueden vivir.
Inmigrantes son porque el destino lo quiso
la industria, antes floreciente ya no interesa
y el capricho del gobernante, que la vida pisó
solo dejó el hambre, y dolor en el vacío inmersa
Una breve mirada atrás, hacia el recuerdo, lágrimas,
secas en el corazón, el alma humedecen, y el amor
no sabe cual es su camino, embargan las penas, más
han de mirar al frente, al sol que ya asoma... esplendor.
Es el amanecer de la vida, la esperanza y la ilusión
pueden ser acogidos, ayudados y con gratitud tratados
será el destino, tal vez el futuro, pero está la pasión
de sus raíces, sus orígenes que nunca serán olvidados
Al-campoamor.