Amigos/as del foro:
En el diario IDEAL, de Granada, y a grandes titulares aparece hoy la siguiente noticia:
"Más de 20.000 procesos militares instruyó en Granada la represión. Una tesis doctoral documenta hasta ahora 7.147 juicios a cargo de 300 jueces militares con 750 fusilados y unos 600 muertos en prisión
Granada fue una de las provincias españolas más castigadas por la represión de la justicia militar durante la guerra civil y en la posguerra, según ha declarado a este periódico el historiador Juan Hidalgo Cámara, autor de una monumental tesis doctoral de casi 1.500 páginas sobre 'La Justicia Militar en Granada: los jueces instructores, causas y procesados en Granada de 1936 hasta 1950'"
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Como hoy es dia festivo y tenía tiempo libre, acabo de enviar a la redacción de este diario la siguiente carta:
Sr. Director de IDEAL.
Ruego a Vd, si a bien lo tiene, la publicación de esta carta
Mediante esta carta quiero hacerme eco de la noticia aparecida hoy en IDEAL según la cual "la represión instruyó en Granada mas de 20.000 procesos militares", a juzgar por la monumental tesis de cerca de 1500 páginas desarrollada por el Sr. D. Juan Hidalgo Cámara y dada a conocer en grandes titulares en este periódico.
Con 76 años de edad, por mi condición de jubilado y por razón de mi profesión anterior como autónomo totalmente independiente, empiezo diciendo que no me considero políticamente de izquierdas ni de derechas, y que desde esa perspectiva y como observador -porque una cosa no quita a la otra- no me gusta la publicación en época electoral de este tipo de noticias.
No soy tan tonto, y creo que conmigo tampoco otros muchos, como para no pensar que sacar a relucir ahora en primera página la memoria histórica de Granada, contándola parcialmente y sólo desde el ángulo favorable a los intereses de las izquierdas, no tiene otro objeto que el de confundir a una gran mayoria de personas que ni siquiera vivieron o ya no se acordaban de aquellos hechos, para sacarle partido electoral.
Con todos mis respetos al Sr. D. Juan Hidalgo y al trabajo siempre respetable que haya podido desarrollar en el plano de investigación histórica, debo decirle que se le ve claramente el plumero al sacar del ámbito académico y difundir públicamente en grandes titulares tal noticia, cuando además presenta su investigación en prensa, parcial e incompleta, sin tener en cuenta las circunstancias de una guerra que hizo enemigos entre si a los españoles por el solo hecho de caer en una zona u otra, en la nacional o en la roja, que entremezcló los odios y venganzas por razones de ideología política con los intereses y rencillas particulares entre las personas de toda índole; una guerra que no acabó al cesar la hostilidad en los frentes de batalla sino que siguió viva en la conciencia de muchos durante largo tiempo, como no podía ser de otra manera y como hubiera sido también si la victoria en los frentes de batalla hubiera caido del otro lado de los contendientes; y una guerra que debió darse por acabada con el concenso entre todas las fuerzas políticas que dio origen a la Constitución, y cuyo concenso, tanto el Sr. Rodríguez Zapatero como Vd. -Sr. Hidalgo- y otros, están intentando romper ahora con tratabajos como el suyo, tan extenso y documentado como mal intencionado e inútil.
¿A dónde quieren llevarnos con la propagación de estas "historias" tan añejas en prensa, radio y televisión precisamente ahora, cuando se acercan las elecciones? ¿Acaso piensa Vd., como el Sr. Rodríguez Zapatero, que la guerra del 1936 no ha acabado todavia, que es necesario dividir y enfrentar de nuevo a la sociedad española, ganar con estos métodos las próximas elecciones e instaurar de nuevo la República para decir que entonces, y solo entonces, habrá acabado la guerra que empezó en el año 1936?
Nó -Sr. Hidalgo-, no pienso aplaudirle por su trabajo. Podía Vd. haber dedicado su tiempo a algo mas sustancial y bondadoso. Y conste que a mí no me mataron a ningún familiar los rojos ni me dieron de comer los nacionales. Lo que soy y tengo, que es bien poco, lo debo a mi esfuerzo y mi trabajo. Y ahora, a las puertas de mi vejez, siento orgullo de poder opinar desde mi modestia, antes que me llegue el alzheimer, y decirle a quien sea y donde sea lo que verdaderamente pienso.
Lo cuento en el foro, que para eso está
Saludos.
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