Antonio don manuel

Registrado: 12 Mar 2006 Mensajes: 390 Ubicación: ESPAÑA
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Publicado: Mie Mar 15, 2006 2:26 pm Asunto: Mirar este articulo |
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A MANOLO ESCOBAR
POR RAQUEL BUZNEGO (PSICOLOGA)
Hace algunos años, bastantes para mi body y muy pocos, un suspiro, para la historia, era quien escribe una niña, una niña que creció a la sombra del franquismo, una sombra asfixiante, peligrosa y temerosa, al menos para muchos, y como ya he contado que mi padre fue uno de los enemigos del sistema, por lo cual cumplió condena durante trece años, ya puede uno intuir que en mi casa las cosas no discurrían precisamente con mucha normalidad (yo nací tras haber quedado mi progenitor en libertad).
Pues he aquí que, con los avatares propios de las circunstancias y que algunos imaginarán, la vida cotidiana se iba viviendo tal como se iba pudiendo.
Entre miedos, incertidumbre, risas y llantos, juegos y deberes, se escuchaba a través de la radio una hermosa voz, una voz que transmitía alegría y amor, la voz que cantó a la madre, al abuelo, a la esposa, a la hija y a la tierra.
Poca gente lo desconoce, su voz llevó alegría hasta el rincón más remoto. Es una voz familiar; los viejos lo recuerdan, los acompañó en momentos duros, los más jóvenes hemos crecido con su voz y a los adolescentes tampoco les es desconocido. Todos conocen a Manolo y todos saben que aún busca su carro, el carro que le robaron una noche de romería.
He cantado sus canciones (en la ducha, claro), he visto algunas de sus películas y he acudido a algunas de sus actuaciones.
El año pasado, estando de vacaciones, he tenido la oportunidad de presenciar uno de sus espectáculos; su puesta en escena es un regalo visual, se mueve con los tiempos, guitarras eléctricas, bailarinas, humor, etc.
Una coreografía digna del personaje, un artista de pies a cabeza, un hombre que pisa el escenario con la elegancia del éxito conquistado a pulso y mantenido con el esfuerzo diario, con la maestría que brinda la experiencia y con la seguridad de conservar digna y sabiamente el hueco que corresponde a su música.
Hace unos días tuve nuevamente la oportunidad de verle actuar y allí estuve, fue un mal día, comenzó a llover iniciada la actuación y hubieron de suspenderla.
A lo que voy, a mi ramalazo cotilla, a mi enfado, a mi indignación por la estupidez y la intransigencia del ser humano:
El año pasado su actuación fue espléndida y su voz maravillosa, por consiguiente un alto porcentaje de gente concluyó que había utilizado el playback. Este año debido a una probable afonía, que se dejó notar cuando presentó la actuación, su voz estaba algo afectada, entonces la gente se miraba y murmuraba, decían que ya no tenía voz.
En otras ocasiones nos deleitó con una magnífica voz, un chorro de voz que te hacía vibrar con algunas canciones, una voz que te embriagaba de alegría en otras, por consiguiente algunos, sorprendidos de esa voz, opinaron que no era una voz en directo. Son las cosas de la vida, las contradicciones del ser humano, las opiniones alegremente vertidas sin conocimiento ni fundamento, la intransigencia de los estúpidos ante cualquier debilidad ajena. Pues Manolo, yo que tú, permíteme la osadía, si tengo una afonía, un mal día, o lo que sea, tiro de grabación y a vivir, te lo puedes permitir campeón, a fin de cuentas algunos, los listos, que siempre hay, van a hablar según su criterio, pues dales el gustazo de acertar aunque sólo sea por los caprichos del azar.
Siento que la lluvia me haya chafado la actuación, pues allí estaba yo, más contenta que unas pascuas, dispuesta a vivir una hora inolvidable. Tus canciones me han acompañado en mi infancia, en mi adolescencia y también las disfruto ahora.
Mi hija, que tiene dieciséis años, también estaba allí, dispuesta a tararear aquello de "Sólo te pido" o " Que te voy a comer"...
Es un orgullo y un placer haber llegado a tantas y tantas generaciones, te lo has currado de lo lindo, con buen hacer, saber y estar.
Y es que, ya lo dice la canción: "Para ser torero hay que poner el alma en el ruedo".
Y tú la sigues poniendo.
http://www.revistafusion.com/2002/octubre/psico109.htm |
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